El tratamiento con espuma es un método que se usa comúnmente para tratar las telangiectasias, en el que se introduce una sustancia esclerosante (medicamento para cerrar las venas) en la vena a través de una aguja fina. Este tratamiento también se conoce como terapia de inyección de várices. El medicamento cierra la vena de manera química, y su duración varía según el paciente. El tratamiento con espuma es un método extremadamente sencillo y eficaz con un bajo riesgo cuando se realiza con precaución.

Después del tratamiento
Después del tratamiento con espuma, la vena se cierra de inmediato; sin embargo, puede tardar un tiempo en desaparecer completamente la apariencia de las várices. Esta duración varía de una persona a otra, y en algunos casos, puede llevar varios meses hasta que las várices desaparezcan por completo. Cuanto mayor sea la várice, más tiempo puede tardar en desaparecer. La eliminación completa de las várices medianas es posible con el tratamiento con espuma, aunque en algunos casos puede ser necesaria más de una sesión.

La paciencia es importante en el tratamiento
El punto más importante en este proceso de tratamiento es que los pacientes tengan paciencia. Puede llevar varios meses ver los mejores resultados del tratamiento. Este período generalmente varía según el organismo de cada persona. La escleroterapia o terapia de inyección es un procedimiento indoloro.

Fases de la Terapia de Inyección para las Várices:

1. El medicamento de espuma se introduce en la vena con una aguja.
2. La espuma cierra la vena desde dentro y detiene el flujo de sangre.
3. Después de un tiempo, la várice se cierra y desaparece gradualmente.

El tratamiento con espuma para la eliminación de várices muestra resultados muy exitosos especialmente en telangiectasias y várices medianas, y brinda una alta satisfacción tras el tratamiento.