Trasplante Capilar con Sedación
La sedación es un tipo de anestesia intermedia entre la anestesia general y la anestesia local. En los trasplantes capilares no se utiliza anestesia general, ya que induce un estado de sueño profundo que puede conllevar numerosos efectos secundarios y riesgos. Con la sedación, en cambio, no se alcanza un sueño completo. Esto permite realizar el trasplante capilar en pacientes seleccionados de manera segura y sin que el paciente experimente dolor.

El trasplante capilar con sedación es una opción ideal para quienes desean someterse a un trasplante capilar, pero que sienten miedo a las agujas, al dolor o a la cirugía, o para quienes tienen una baja tolerancia al dolor o no toleran ver sangre. También es una opción segura para personas con enfermedades cardíacas o hipertensión.

Proceso del Trasplante Capilar con Sedación:

1. El médico evalúa si la sedación es adecuada para el paciente.
2. Si es adecuada, el médico administra medicamentos sedoanalgésicos por vía intravenosa, que actúan rápidamente para inducir un estado de sueño ligero y calma sin pérdida completa de la consciencia. Este estado dura aproximadamente entre 10 y 15 minutos.
3. Durante la sedación, se aplica anestesia local en la zona del trasplante, permitiendo que el paciente continúe con el procedimiento sin dolor, estrés o ansiedad.

Preparación para la Sedación: Se recomienda no ingerir alimentos al menos 3 horas antes de la sedación, y evitar el consumo de alcohol y tabaco previo al procedimiento.

Recuperación y Postoperatorio: Después del trasplante capilar con sedación, el paciente puede reanudar su vida diaria el mismo día; sin embargo, no se recomienda conducir ese día.